Fiesta de búhos y mariquitas

¡Hola, hola! ¡Cómo os he echado de menos! Pero es que tenía taaaanto por corregir que no me daba la vida. Ahora ya estoy más tranquila, con los deberes hechos y las notas puestas esperando mis ansiadas vacaciones. Vacaciones del instituto claro, porque trabajo no me falta. ¿Qué tal vosotros/as? ¿Deseando que lleguen los días de fiesta?

Tenía ya muchas ganas de contaros qué al fue la fiesta de Princess. Cómo ya os conté Princess cumplió dos años a finales de febrero y para celebrarlo quería una fiesta de búhos y mariquitas. “¡Toma ya!” -Pensé- “a ver como los conjuntamos”. Aunque al final no fue nada difícil. Ya os he ido dando pistas, como con el farolillo búho o los cartelitos para la comida, de como iba tomando forma. Al final no me compliqué la vida, no intenté relacionar los dos animales, ni buscar un hilo conductor ni nada. Simplemente escogí 3 colores (rosa palo, blanco y mint) y con eso y los dos animalitos montamos el tinglado.

La fiesta la hicimos en un garage, así que no teníamos tampoco mucho espacio que decorar y no convenía saturarlo porque es largo, pero estrechito. Pusimos tres mesas, dos para salado y una para dulce, apoyadas en una de las paredes del garage. La guirnalda de banderines con nombre que hicimos el año pasado para la ocasión presidía el ancho de las dos mesas. Debajo de ésta, una de búhos cubría el ancho de las mesas de salado, y la guirnalda Princesas de Uayayu y un dos forrado con washitape por mí presidían la mesa dulce. A lado y lado de las mesas colgaban dos farolillos en forma de búho. En el resto de la estancia, colgados desde el techo, había globos rojos que llenamos de gomets negros para simular las mariquitas. Un 2 enorme y plateado presidía la entrada a la fiesta y mariquitas y flores en 3D decoraban la pared paralela a la des las mesas, pero muy claritos, sin cargar. Así pues, nos quedó una decoración sencilla, pero resultona a mi entender. A Princess le encantó, estaba emocionadísima. La mesa, como os podéis imaginar estaba mantelada en blanco y los cartelitos que os enseñé indicaban de qué se trataba cada plato que mi madre, mi suegra y yo cocinamos con amor.

Centrándonos un poco en el dulce, hubo tres cosas que centraron toda la atención de mayores y pequeños. Por su belleza, orginalidad, colorido y perfección. Os estoy hablando de la tarta y las magdalenas que me hizo Ponle azúcar a la vida para la ocasión, y las galletas de búhos y mariquitas de Moon’s Sweets. Los que me seguís en RRSS seguro que ya sabéis de qué os hablo, para el resto os dejo unas fotos. Os las recomiendo muchísimo a las dos, son dos chicas que empiezan y a las que les encanta lo que hacen, además tienen precios muy asequibles. Si clicáis sobre sus nombres iréis directos a su fanpage para ver todas sus creaciones.

Ya en lo que es el ambiente, Princess estaba en su salsa, rodeada de amigos y familires y sintiéndose protagonista. Es una gran amfitriona y regaló sonrisas, besos y abrazos por doquier. Le encantó tener a sus amiguitos en casa, que le ayudaran a soplar las velas, jugar con ellos pero sobretodo… ¡compartir la piñata! Bueno, la piñata… el confeti que había dentro. Los niños son increibles: me surro una piñata con pomperos, pulseras, yoyós, camaritas de fotos y chuches y a ellos les vuelve locos el confeti! Se pasaron horas y horas jugando con el mientras Jaime, de Beauty & Smile Photography les hacía unas fotos preciosas, muchas de las que veis en este post son suyas precisamente.

Princess disfrutó como lo que es, como una enana, y nosotros también de verla tan feliz. Al fin y al cabo eso, y no los manchurrones de la ropa que lavamos tres veces para dejar cristiana, es lo que cuenta, ¿verdad? 😉

¿Qué os parece la fiesta? ¿Cómo lo celebráis en casa? ¿Sois de fiestas temáticas o vais a lo tradicional? Contadme, contadme.